En la Isla de Chiloé, al sur de Chile, se ubica una atracción turística que muchos consideran surrealista: el bosque hundido de los árboles muertos. En 1960, un fuerte terremoto causó un tsunami que inundó el valle de Chepu, dejando como resultado centenares de árboles muertos.
Actualmente se puede recorrer estos humedales del río Chepu en kayac. Esta fotografía de Chepu Adventures Ecolodge muestra un paseo al amanecer en medio de los famosos troncos muertos.